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Historia de la Farmacia
Devenir farmacéutico en San Antonio de las Vueltas, 1867-2018
Pharmaceutical evolution in San Antonio de las Vueltas, 1867-2018
Urbano Monteagudo Romero1
Miriam Iliex Guirado López2
Kenia Rodríguez González3
Xiomara Cadenas Pérez4
1 Sectorial Municipal de Salud Camajuaní. Villa Clara, Cuba.
2 Red de Farmacias Camajuaní. Villa Clara, Cuba.
3 Universidad Central Marta Abreu de las Villas. Villa Clara, Cuba.
RESUMEN
Introducción: La mayoría de los países, desde hace siglos, consideran la
farmacia como la ciencia y práctica de la preparación,
dispensación de medicamentos y los productos medicinales. Lo que la
instituye como una de las profesiones más antiguas en la historia de
la humanidad, que mantiene su vigencia hasta nuestros días por su
vital importancia para la sociedad. San Antonio de las Vueltas es un
territorio cubano de la provincia de Villa Clara que forma parte de uno de
los Consejos populares del municipio de
Camajuaní
y en el que la farmacia tiene su antecedente en 1867.
Objetivo: Caracterizar la trayectoria y transformación de la farmacia en San
Antonio de las Vueltas en el periodo de 1867-2018.
Métodos : Investigación cualitativa, se empleó la revisión
bibliográfica y la técnica del fichaje de documentos para la
obtención de datos. Para su evaluación se utilizó el
método histórico-lógico y el analítico sintético,
la entrevista semiestructurada, la consulta a expertos y a especialistas,
así como la observación participante.
Conclusiones : La farmacia local en Vueltas fue una institución nacida del devenir
histórico de la localidad y ha respondido a necesidades del pueblo
según determinados periodos. En su desempeño reforzó el
sentido de continuidad y pertenencia a patrones identitarios que definen el
contenido de esta institución. Por lo que la convierte en un elemento
unificador y centro de convergencia para los contenidos de la vida social
del poblado. Esta instancia de la farmacia, casi perdida en la historia, ha
dejado un vacío que aún perdura en los procesos culturales de la
nación.
Palabras clave: historia; farmacia; Vueltas.
ABSTRACT
Introduction: For centuries most countries have considered Pharmacy as the science and
practice of preparing, dispensing medications and medicinal products, what
institutes it as one of the oldest professions in the history of humanity
remaining valid nowadays due to its importance for society. San Antonio de
las Vueltas is a Cuban territory in the province of Villa Clara that is
part of one of the Popular Councils of Camajuaní municipality and in
which Pharmacy has its antecedents from 1867.
Objective:
To characterize the history and transformation of the pharmacies in San
Antonio de las Vueltas from 1867 to 2018.
Methods:
Qualitative research. The bibliographic review and the document recording
technique were used to obtain data. The historical-logical and synthetic
analytical methods, the semi-structured interview, the consultation with
experts and specialists, as well as participant observation were used for
the evaluation.
Conclusions:
The local pharmacy in Vueltas was an institution born from the historical
evolution of the town and as such, it has responded to the needs of the
people in certain periods. In its performance, it reinforced the sense of
continuity and belonging to identity patterns that define the content of
this town's people. Therefore, it becomes a unifying element and a center
of convergence for the contents of the town's social life. This instance of
pharmacy, almost lost in history, has left a void that still persists in
the cultural processes of the nation.
Keywords: history; pharmacy; Vueltas.
Recibido: 06/01/2020
Aceptado: 20/03/2020
INTRODUCCIÓN
La imprecisión del siglo xix
La farmacia y sus expectativas poseen una historia muy singular en las tierras de América. Desde los tiempos de la Colonia apareció en Cuba como una institución social de insoslayable valor; primero con una marcada intención económico-comercial a la que pronto se le unió la transmisión de valores culturales y éticos. El enriquecimiento y difusión de esta nueva institución social fue dándose a la par del proceso que completó el nacimiento de la identidad nacional cubana, con el que fue intercambiando elementos hasta jugar un papel trascendental en nuestra identidad. No es posible imaginar la historia de la independencia de Cuba sin la participación de los más destacados farmacéuticos y pensadores cubanos del siglo xix o las gestas libertadoras nacionales sin que aparezcan, traídos por su propia valía, los nombres de los hermanos Johnson o Antonio Guiteras Holmes, entre otros.
La historia de la farmacia en toda la Isla estuvo muy relacionada con el nivel de prosperidad económica de las distintas Villas y con el proceso de poblamiento del territorio nacional. El primer factor haría nacer distintos boticarios en cada villa, el segundo haría surgir la necesidad de crear boticas en otros nuevos asentamientos humanos que venían cobrando importancia por su prosperidad económica y social. De esta manera fue que el proceso de surgimiento de la farmacia se extendió a la región central del país.
El siglo xix marcó un ritmo de prosperidad económica sin precedentes para Cuba debido, principalmente, al progreso de la industria azucarera que trajo consigo un aumento considerable de la población. Este comportamiento estaba relacionado, no solo con el crecimiento natural, también influyeron en su desarrollo las inmigraciones europeas y la importación de mano de obra esclava, propias de la época. Por lo que hubo un incremento poblacional, con la formación de nuevos asentamientos y el ensanchamiento de los que ya existían.
Este fenómeno también acrecentó las necesidades de atención a la salud de la población e hizo posible la renovación de las vías de comunicación entre los pobladores. Se puede señalar, en este sentido, la extensión del ferrocarril, la construcción y reparación de caminos, la extensión del uso del correo y, por supuesto, la aparición de las farmacias.
La región central del país, área de interés por ser el contexto del núcleo poblacional al que se refiere el presente estudio, dio respuesta rápida a las mencionadas necesidades de interacción humana. Además de la restauración de viales y medios de transporte, que de alguna manera seguían teniendo condiciones deplorables, la farmacia como ciencia tuvo una irrupción triunfal en la época. Según la prensa local de Remedios(1) hay referencia sobre una farmacia propiedad de un individuo de apellido Pujol, que desapareció en el año 1867. La farmacia, además de centrarse en las necesidades y problemáticas de estos núcleos poblacionales, también comenzó a ocuparse de todo lo concerniente a las enfermedades que aquejaban a esos pobladores y de esta manera se extendía su área de atención. Este mismo comportamiento tuvieron las farmacias en la Villa de San Juan de los Remedios y las del poblado de Vueltas. De ahí que el objetivo del presente estudio sea caracterizar la trayectoria y transformación de la farmacia en San Antonio de las Vueltas en el periodo de 1867-2018.
MÉTODOS
Se empleó la revisión bibliográfica y la técnica del fichaje de documentos para la obtención de datos. Para su evaluación se utilizó el método histórico-lógico y el analítico sintético. Se revisaron noticias y artículos de la prensa de la época, como el periódico El Criterio. (1) Para su evaluación se utilizó el método histórico-lógico y el analítico sintético, la entrevista semiestructurada, la consulta a expertos y a especialistas, así como la observación participante. Las entrevistas se realizaron a valiosos y reconocidos historiadores locales. Se escogió como inicio del periodo de estudio la fecha de aparición de la primera farmacia, como institución, en el territorio voltense, la que correspondió a 1867, según las fuentes documentales consultadas, por lo que se analizó la información comprendida entre 1867 y 2018.
DESARROLLO
El crecimiento económico de la Isla en el siglo xix y la expansión de la industria azucarera trajeron como consecuencia movimientos demográficos que definirían una nueva etapa en el poblamiento de Cuba. San Antonio de las Vueltas (conocida como Vueltas), como parte de la isla, es un poblado que surgió de forma espontánea, sin fecha de fundación ni real cédula que dictase su creación. Se originó por la tendencia habitual entre los habitantes de las áreas rurales que fabricaban sus casas a la vera de los caminos de mayor importancia. De aquí se desprende el trazado urbano tan irregular que hoy se puede observar en Vueltas, y que ya venía delineándose desde 1828.
En la década del 30 el crecimiento del núcleo poblacional fue vertiginoso y su vida económica fue incrementándose sobre la actividad tabacalera y azucarera. En 1840 le fue reconocido el rango de asentamiento con organización institucional, según las concepciones demográficas de la época; continuó así su crecimiento alentado, también, por las inmigraciones y en 1879 fue erigido como municipio.(2)
La profesión farmacéutica logró su razón de ser en Cuba cuando se creó la Junta Superior Gubernativa de la Facultad de Farmacia por Real Disposición del 9 de enero de 1830, la que fuera instalada en La Habana el 24 de diciembre de 1833. Así quedó oficialmente reconocida esta actividad en Cuba separada de la de Medicina y de la Cirugía.(3,4)
El desarrollo de las vías de comunicación en Vueltas no fue el mejor, ni después de la creación de su ayuntamiento el primero de enero de 1879, ni en los años anteriores. Se retrasó la aparición del ferrocarril y los caminos estaban en deplorables condiciones. Sin embargo, la situación sanitaria que obligaba a la interacción humana, tuvo como consecuencia que se desarrollara la farmacia como ciencia.(2)
En el análisis de la farmacia en Vueltas, desde su perspectiva histórica, se pudieron identificar tres etapas bien definidas.
− Primera etapa: entre 1867 y 1900, sustentada, en lo fundamental, por las problemáticas de los años terminales del colonialismo español.
− Segunda etapa: entre 1907 y 1959, la que representa los giros y convulsiones de la república neocolonial.
− Tercera etapa: entre 1960 y 2018, que está marcada como el período de transformaciones posrevolución.
En el año 1867 según la prensa local de Remedios existe referencia de una farmacia que desapareció en 1869, que era propiedad de un individuo de apellido Pujol. Esta farmacia atendía al poblado que constaba de 40 casas con 400 habitantes.(1,2)
Un año más tarde en 1874, existe la referencia de la farmacia "El Progreso", situada en la calle Real y propiedad del licenciado Miguel Grau Folch, quien falleció el 10 de enero de 1883. Este licenciado, de origen catalán, era farmacéutico y fue el primer alcalde de San Antonio de las Vueltas, que a pesar de las limitaciones, entorpecimientos y obstáculos propios de la corrupción imperante en la República realizó ingentes esfuerzos por la urbanización local y tuvo una labor destacada en la lucha por construir la carretera a Vega de Palma.(1,2)
En el siglo xix aparecieron los boticarios que "desde sus establecimientos recetaban y preparaban fórmulas para contrarrestar los diferentes males".(3) Según los anuncios que se publicaron en el periódico El Criterio, meses después de la constitución del primer comité Liberal, fue fundada "La Botica Nueva", propiedad del licenciado Buenaventura Puigdollers en 1879. (1) Con fecha 1884 fue fundada la farmacia "El Oriente", propiedad del licenciado Fausto Sánchez Cantero, después la propiedad la adquirió J. Puget Corrons que la trasladó a Camajuaní.(1)
El primer periódico impreso en Vueltas, nombrado El Recién Nacido, que marcó un hito histórico en el desarrollo y cultura de este pueblo, fue fundado en el año 1885 y sirvió de seno para su nacimiento la farmacia del Dr. Enrique Hernández. El periódico era tan pequeño que se imprimía en esta farmacia con las letras de la pequeña imprenta que se usaba para hacer las etiquetas de los medicamentos. Se publicaba todas las semanas y era de índole chistoso. Fueron sus principales colaboradores además del dueño, el licenciado Indalecio Hernández y el médico, Dr. Juan José Domínguez Delaney. También fue colaborador del periódico el señor Baltasar Pacheco, dependiente de la mencionada farmacia.(1,2)
Dos años después, en 1887, la viuda del Dr. Miguel Grau Foch hizo construir la farmacia "La Caridad" en la calle Herrada No 26. La Caridad fue dirigida por el licenciado A. Díaz Sellénde desde 1914 a 1930 y en 1930 pasó a ser propiedad de Rodolfo Herrera.(1)
Al iniciarse la Guerra de Independencia cubana, el "24 de febrero" de 1895, Juan Bruno Zayas se incorporó al Ejército Libertador. Se alzó en armas el 25 de abril de 1895 al frente de un grupo en Vega Alta y lo secundaba Pelayo Peláez, farmacéutico de Encrucijada y de Vueltas el licenciado Indalecio Hernández.(2)
Ya en los últimos años del colonialismo (1898) se hace referencia a la Farmacia "La Salud" propiedad del Licenciado A. Díaz Sellén, situada en la calle Espartero No. 7, la que se derrumbó debido a un incendio en 1900.(1)
En las farmacias se hacían preparados y soluciones para atender afecciones de los habitantes de Vueltas en aquella época. Las boticas o farmacias devinieron cuerpo de atención a lesionados de primera urgencia y los farmacéuticos desempeñaron una función importante en la atención médico-sanitaria y la vida pública del poblado.(2,3,4) La figura del farmacéutico era quizás el elemento fundamental en los escasos servicios de salud disponibles, en su mayor parte para los sectores de mejor solvencia económica. El uso de la medicina tradicional estaba muy extendido entre los sectores de menos ingresos de la población, así como la presencia de los llamados curanderos, las comadronas o las mujeres que solo acudían para remedios caseros como: sobar el vientre, emplastos, pasar la cinta y el ensalmo.(4,5)
Con la llegada de la República neocolonial en 1907, "La Botica Nueva" llegó a ser propiedad de Lucas Colón Vives y fue dirigida por el Licenciado Buenaventura Baeza entre 1907 y 1928. En este último año la propiedad fue adquirida por J. García.(1) En 1907 también surgió la farmacia "San Antonio" propiedad de Juan M. Núñez Rodríguez, situada en Maceo y Herrada. La dirigió Valentín Alacán, después pasó a ser propiedad del Licenciado Nieto Prats que en 1909 la trasladó a Zulueta.(1) Hubo en 1910 otra farmacia propiedad de J. M. Núñez, situada en la calle Agramonte No. 5, dirigida por el Licenciado Alacán, que pasó a ser administrada por una mujer en 1925, la Doctora María González Valdés.(1)
En 1915 se trasladó a la capital de la República el Dr. Enrique de la Hoz Portal, estudiando allí la carrera de Farmacia y ganándose el sustento como dependiente en la gran droguería del Dr. Ernesto Serra donde alcanzó sucesivos ascensos como premio a su inteligencia y comportamiento. En junio de 1918 ya poseía el título de Doctor en Farmacia y el día 27 de mayo de 1920 abrió sus puertas en Vueltas una nueva farmacia, la del Dr. Enrique de la Hoz Portal.(1,2) Este establecimiento cuyo prestigio y clientela aumentaron por día estaba situada en Cisneros No. 14 y en 1922 se trasladó para calle Agramante No. 5. Parece que el destino se propuso hacer de este farmacéutico una excepción de la regla en relación con el viejo adagio de que "nadie en su tierra es rey". Desde su iniciación en la vida comercial de su pueblo, el Dr. Enrique de la Hoz Portal no dejó un solo instante de servir, en todos los aspectos, los intereses de su Vueltas querido.(1)
En 1930 Vueltas contaba con cuatro farmacias: "La Caridad", "La Botica Nueva", San Antonio y la farmacia propiedad del Dr. De la Hoz. (1) El periódico de la época, El Amanecer, hacía propaganda a la farmacia del Dr. Juan F. García, el que gracias a su posición acaudalada compró la farmacia del Dr. De la Hoz y costeaba sus anuncios en 1948.(1,2)
En 1959 existían en la localidad tres farmacias:
− una en el local donde se encuentra actualmente, y la única que se mantiene en la actualidad, que perteneció al Dr. Adolfo Enrique Martínez, situada en Manuel Herrada No. 32. Esta farmacia con todas sus pertenencias, enseres, útiles, mercancías, muebles, armatostes, vidrieras y demás utensilios, había sido adquirida por Enrique Martínez del Dr. Juan F. García por un precio de dos mil quinientos pesos, en una transacción legal que se realizó ante el Dr. Andrés Garay Poch, abogado y notario, el 29 de julio de 1942;(6)
− otra farmacia era "La Caridad", que en esta fecha era propiedad de la Dra. María Díaz Elizunda natural de Quemado de Güines, ubicada donde se encuentra en estos momentos la tienda Panamericana del pueblo de Vueltas,
− la última de las tres farmacias estaba en la Calle Agramonte No. 12, era regentada por la Dra. Gladys Oviedo Hernández y su propietario fue Llovet de apellido, residente en Encrucijada. En el local vive actualmente Sonia Rotella Alfonso, viuda de Raúl Enrique Bello, quien fuera su antiguo empleado.
En todas estas farmacias existía un dispensario y además de medicamentos y preparados farmacéuticos se vendían productos de calidad para belleza y aseo, tales como: perfumes, esmalte de uñas, pasta dental y también algunos medicamentos para animales. Hay quienes afirman que de ahí proviene la frase: "hay de todo como en botica".
Con el triunfo de la Revolución, las farmacias de la región central del país modificaron su estructura a tono con las transformaciones que sufrió la isla. La primera medida que se adoptó fue la rebaja de medicamentos para la población y pocos años después, en 1962, con el proceso de nacionalización pasaron a manos del estado.(7)
La tarea de intervenir las farmacias en Vueltas le fue dada a Pedro Nápoles Jiménez, integrante de las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR). Cuando Nápoles Jiménez le entregó toda la documentación al Jefe de la Empresa de Farmacias en Santa Clara, de apellido Orizondo, le encargó la administración de la única farmacia que quedó en el poblado y los trabajadores de las otras dos pasaron a prestar servicios en ella. En noviembre de 1963 su administración estuvo a cargo de Alberto Menéndez y más tarde la asumió Armando Olardes.
En 1972 se abrió una farmacia en el poblado de Sagua la Chica, del que tomó su nombre, y pertenecía al área de Vueltas. De esta manera se daba solución al inconveniente que implicaba para sus pobladores acudir a Vueltas para adquirir sus tratamientos.
La década del noventa fue decisiva para la farmacopea cubana, de nuevo surge la necesidad de un reordenamiento. En 1991 se creó el Sistema Nacional de Medicamentos, con él se clasificaron las farmacias. La farmacia del poblado de Vueltas obtuvo la condición de Farmacia Especial de Área de Salud.(7) En esa propia década se implementó en la farmacia la venta y producción de productos de la medicina natural y tradicional.
A la llegada del siglo xxi, la Farmacia Especial de Área de Salud 634 cuenta en su plantilla con un total de 21 trabajadores y está conformada por un área de rebotica, área dispensarial, oficinas y un almacén. La unidad presta servicios las 24 horas del día. Además de esta farmacia en el consejo popular de Vueltas existen otras dos farmacias comunitarias que son: Unidad 637 en el poblado de Sagua la Chica y la Unidad 725 en el poblado de Macagual, que pertenecen a la misma área de salud.
CONCLUSIONES
La farmacia local en Vueltas fue una institución nacida del devenir histórico de la localidad y ha respondido a necesidades del pueblo según determinados periodos. En su desempeño reforzó el sentido de continuidad y pertenencia a patrones identitarios que definen el contenido de esta institución. Por lo que la convierte en un elemento unificador y centro de convergencia para los contenidos de la vida social del poblado. Esta instancia de la farmacia, casi perdida en la historia, ha dejado un vacío que aún perdura en los procesos culturales de la nación.
Dedicatoria
A los profesionales farmacéuticos del pasado y del presente de San Antonio de las Vueltas, los que han dado vida y prosperidad a nuestro abnegado pueblo lleno de tradiciones y cubanía. Al Dr. Enrique de la Hoz Portal, subdirector de la redacción del periódico El Criterio, merecedor de reconocimiento eterno por su valiosa y meritoria obra, gracias a la cual ha sido posible trasladar a la posteridad y a las actuales generaciones el conocimiento de la gran historia de este pequeño pueblo de Vueltas y destacar el papel de sus farmacias.
Recomendaciones
Los autores quieren estimular a los responsables que en otras instancias conozcan de este trabajo, para que contribuyan con ulteriores estudios sobre estos menesteres al conocimiento de la historia de nuestros pueblos.
Agradecimientos
Los autores agradecen la información aportada en mayo de 2014 por: Sonia Rotella Alfonso (viuda de Raúl Enrique Bello, extrabajador de la Farmacia de la calle Agramonte No. 12); Lázaro Valdés Martínez (Doctor en Ciencias Pedagógica); Pedro Nápoles Jiménez (exadministrador de la Farmacia de la calle Manuel Herrada y Danilo González Reyes (extrabajador de la Farmacia de la calle Manuel Herrada No 32).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Alemany E, De La Hoz E. La Farmacia en nuestro término. El Criterio. Edición Especial. 10 abr. 1928;45-46.
2. Martínez Fortún, Foyo J. Apuntes Históricos de San Antonio de Las Vueltas. La Habana: Ayuntamiento de San Juan de los Remedios; 1944. p. 23-78.
3. García Hernández M, Martínez-Fortún Follo S. Apuntes históricos relativos a la Farmacia en Cuba. Cuad Hist Salud Públ. 1967;33:12-17.
4. García M, Martínez S. Apuntes para la historia de la farmacia en Cuba. Cuad Hist Salud Públ. 1988;33:27-42.
5. Le Roy y Gálvez, LF. Revista Universidad de La Habana. 1973;(200):161.
6. Venta de Establecimiento de Farmacia otorgada por Dr. Juan F. García a favor de Dr. Adolfo Enrique Martínez. Copia de Acta de Escritura. No 84/1942, julio 29.
7. Pérez Peña J. Sistema nacional de medicamentos de Cuba. 2da ed. La Habana: MINSAP; 2003. p. 2-8.
Conflicto de intereses
Los autores declaran que no existe conflicto de intereses.
Contribución de los autores
Urbano Monteagudo Romero: búsqueda de la información y redacción del artículo y aprobación de su versión final.
Miriam IliexGuirado López : entrevistas y redacción del artículo.
Kenia Rodríguez González: búsqueda de la información.
Xiomara Cadenas Pérez: búsqueda de la información.
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